Hormonas y Postura Corporal: Una Relación Clave para el Bienestar

Feb 17, 2025

Introducción

Las hormonas son el motor oculto de muchos procesos en nuestro cuerpo. Pequeñas sustancias bioquímicas, producidas por glándulas como la tiroides, las suprarrenales o las gónadas, que influyen en el crecimiento óseo, el sistema muscular y las respuestas al estrés.

La postura corporal, por otro lado, hace referencia a la alineación de nuestro cuerpo en el espacio. Mantener una buena postura es clave para evitar dolores musculares y articulares, especialmente en la espalda. Pero aquí viene lo interesante: la relación entre hormonas y postura es bidireccional. Sí, las hormonas pueden afectar nuestra postura. Pero la postura, a su vez, también puede influir en la producción hormonal.

Por ejemplo, una postura encorvada, con los hombros caídos y la cabeza adelantada, no solo puede generar molestias físicas. También activa respuestas bioquímicas que afectan el bienestar general. No es solo una cuestión estética. Es salud.

Hormonas clave y su relación con la postura

Cortisol: la hormona del estrés y su impacto postural

Una de las hormonas más conocidas es el cortisol. Se libera cuando estamos bajo presión, en momentos de estrés, ansiedad o miedo. Si sus niveles se mantienen altos en sangre (Factor Liberador de Corticotropina), el cuerpo entra en un estado de alerta permanente. Los músculos se tensan y la movilidad articular se reduce, produciendo cambios en nuestra postura.  Incluso puede afectar el estado de ánimo, contribuyendo a la ansiedad, la depresión o la fatiga crónica. Nuestro cuerpo se siente más pesado.

Testosterona y estrógenos: confianza y postura erguida

La testosterona tiene mucho que ver con la fuerza y la seguridad. Cuando hay niveles adecuados, la postura tiende a ser más abierta, más erguida. Al contrario, cuando es baja, es común ver una postura más encogida. Es como si el cuerpo reflejara esa falta de energía.

Los estrógenos también cumplen una función importante. No solo en la salud ósea y muscular, sino en la elasticidad del cuerpo. Una buena producción de estas hormonas ayuda a mantener una postura más equilibrada.

Endorfinas y dopamina: movilidad y dolor postural

Son las hormonas del bienestar. Son las encargadas de reducir la sensación de dolor y mejorar el estado de ánimo. Cuando el cuerpo produce suficientes, los músculos se sienten más relajados. La postura se vuelve más natural. El ejercicio físico es un buen aliado para aumentar los niveles de endorfinas y dopamina.

Hormonas tiroideas: equilibrio y estabilidad muscular

Las hormonas de la tiroides regulan el metabolismo y la energía del cuerpo. Son esenciales para la musculatura postural. En el caso del hipotiroidismo, los músculos pueden volverse débiles, generando fatiga y afectando la postura. En cambio, si existe un exceso de esta hormona (hipertiroidismo), pueden aparecer temblores o debilidad muscular, lo que también desajusta el alineamiento corporal.

El impacto de la postura en la producción hormonal

No solo las hormonas afectan la postura. La postura también modifica la producción hormonal.

Se ha demostrado que una postura erguida, con la cabeza, hombros y espalda bien posicionados, puede aumentar los niveles de testosterona y reducir el cortisol. Esto implica de forma inconsciente una mejor sensación de confianza y menos estrés.

Uno de los estudios más famosos en este campo es el del Power Pose. Amy Cuddy es una psicóloga social, escritora y conferencista estadounidense, conocida principalmente por su investigación sobre el lenguaje corporal, la confianza en uno mismo y el efecto del “Power Pose”. Según esta teoría, mantener una postura expansiva durante solo dos minutos puede modificar la secreción de hormonas. Y sí, mejorar el estado de ánimo y la actitud. En definitiva, la autoconfianza y la percepción de seguridad en uno mismo.

Ejercicios y técnicas fisioterapéuticas recomendadas

La buena noticia es que podemos intervenir. Mantener hábitos saludables es clave, pero también hay estrategias específicas para mejorar la postura y regular las hormonas:

  • Corrección postural: Ejercicios de alineación, estiramientos de columna y fortalecimiento del core (zona abdominal y lumbar) ayudan a mantener una postura saludable. En este sentido, el Método Mézières es una técnica realizada por fisioterapeutas especializado que permite corregir problemas posturales y lesiones músculo-esqueléticas.
  • Mecánica respiratoria: Respirar de manera profunda y controlada reduce el cortisol y mejora la relajación muscular. No es solo una cuestión de oxígeno. Mejorar la mecánica del tórax y columna favorece la regulación bioquímica, tanto de intercambio gaseoso como la secreción de buenas hormonas.
  • Flexibilidad muscular: Mantener una buena elasticidad previene tensiones, mejora el rango de movimiento y protege las articulaciones.

Conclusión

La relación entre hormonas y postura es más importante de lo que solemos pensar. Mantener una postura erguida no solo mejora la apariencia. También tiene un impacto directo en la regulación hormonal, reduciendo el estrés y aumentando la energía.

A su vez, conocer el papel de las hormonas en la musculatura postural nos ayuda a entender mejor nuestro cuerpo. Y prevenir futuras lesiones.

Si quieres mejorar tu postura y equilibrio hormonal, consulta con un fisioterapeuta especializado. Puede diseñar una rutina personalizada para ti. Porque sí, tu cuerpo y tu mente te lo agradecerán.

 

Referencias

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  • Cuddy, Amy; Schultz, Jack; Fosse, Nathan. P-Curving a More Comprehensive Body of Research on Postural Feedback Reveals Clear Evidential Value for Power-Posing Effects: Reply to Simmons and Simonsohn. Psychological Science 2018; 29 (4): 656–666.
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  • Veenstra, L., Schneider, I.K. & Koole, S.L. Embodied mood regulation: the impact of body posture on mood recovery, negative thoughts, and mood-congruent recall. Cognition and Emotion 2017; 31(7): 1361–1376.

Autor: José Ramirez-Moreno. Fisioterapeuta.
Co-director de Centre de Fisioteràpia Kinemez
Profesor asociado Universitat Internacional de Catalunya (Barcelona)
Más información sobre el Método Mézières en
www.kinemez.com